El ayuno ha sido una práctica milenaria seguida en todo el mundo con el objectivo de depuar el organismo y toda su geometría sagrada. Pero hoy, más que en el pasado, muchos Seres Humanos ayunan de forma consciente, periódica e intermitente, para eliminar, desintoxicar, regenerar y sanar los desequilibrios causados por el estrés cotidiano, por los patrones alimentarios inadequados y perjudiciales para el organismo, o incluso por la contaminación ambiental.
También es cierto que algunas personas ayunan para estandarizar su cuerpo al estereotipo de belleza «top model’, profundamente arraigado en la sociedad moderna. Sin embargo, la gran mayoría opta por el ayuno para restablecer el orden en el metabolismo, en el sistema hormonal, mejorar la inmunidad y, sobre todo, detener la propagación de ciertos desequilibrios, que pueden o no desencadenar las llamadas enfermedades.
Cualquiera que haya estado enfermo sabe que en ese momento no tiene apetito y por lo tanto opta ayunar de forma natural o comer una comida muy ligera. Esta es la forma que tiene el organismo de estimular sus defensas en las primeras etapas de una infección. Gerard Deulofeu, jugador de fútbol profesional de Udinese, club de fútbol profesional en Italia, que en entrevista al canal de YouTube ‘Regenera’, asumió los ‘milagros’ que el ayuno intermitente trajo para su vida, tanto en la recuperación de lesiones como en su energía diaria como futbolista.
Según los expertos, el ayuno hace que nuestras células utilicen la grasa ya está en el cuerpo para producir la energía que necesitan, lo que ayuda a acelerar el proceso de pérdida de peso, equilibrar los niveles de azúcar en la sangre y activar el sistema inmunológico para combatir la inflamación en el cuerpo.
El ayuno se ve como el reequilibrio de la energía vital del Cuerpo, del Alma y del Espíritu, una especie de “reinicio” para la autocuración. No es casualidad que el ritmo de los amantes del ayuno haya crecido a un ritmo rápido en los últimos años.
¿Cuales son los beneficios?
- Control del apetito y educación del estómago;
- Elimina toxinas;
- Favorece la limpieza intestinal y estimula la flora intestinal;
- Fortalece el sistema inmunológico;
- Consume grasa acumulada, incluso en las arterias;
- Reduce la grasa del hígado;
- Disminuye la resistencia a la insulina;
- Disminuye el colesterol;
- Reduce el riesgo de desequilibrios cardiovasculares;
- Disminuye el peso;
- Estimula el buen humor …
¿Quién debería optar por el ayuno?
El ayuno también es recomendable para quien está sano y consciente, siempre debe acudir a un especialista en nutrición para averiguar qué tipo de ayuno se adpata mejor a su caso. Sin embargo, cabe destacar que durante la pausa alimentaria se deben ingerir líquidos, como agua, infusiones o café, sin azúcar ni edulcorantes, para que no haya deshidratación.
También debe tenerse en cuenta que el ayuno no es un sacrificio, ni tampoco debe pasarse mal. Si la persona siente que la sensación de hambre es demasiado grande, entonces debe elegir alimentos ligeros y bajos en azúcar y grasa, preferiblemente vegetales o frutas.
Las ventanas de alimentación y de ayuno deben definirse según el momento, la estación del año, el estado de salud y la necesidad de cada Ser. Existen muchas combinaciones posibles de ayuno, que puede ser intermitente o total, durante un período determinado que puede ser corto, más largo o incluso continuo.
La realidad muestra que el ayuno intermitente gana más adeptos con cada día que pasa. Consiste en saltarse comidas durante siete días, por ejemplo, no cenar ni desayunar al día siguiente. También son muchas las personas que optan por el ayuno intermitente durante dos días a la semana del año.
Luego están los que hacen un ayuno total en cada ciclo lunar o durante 48 horas en los solsticios de verano e invierno.
¿Quién no debería ayunar?
El ayuno está contraindicado para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. Es importante subrayar que la decisión de ayunar por más tiempo e intensidad, por ejemplo, durante unas semanas, debe ser supervisada por un especialista en salud y nutrición para asegurar que todo salga según lo planeado.
¿Y después del ayuno?
La primera comida después de un período de ayuno debe ser ligera y de fácil digestión, como una sopa y un plato que puede tener arroz, puré, huevo cocido, verduras o pescado y fruta. Se deben evitar los platos con alimentos fritos [se debe utilizar aceite de coco, ya que es más beneficioso para la salud], carne roja, productos procesados y ricos en grasas.
Este texto es una toma de conciencia. De acuerdo con la estación del año y el momento en que se encuentra, corresponde a cada Ser sentir qué alimentos debe consumir. La dosis y frecuencia depende de la naturaleza y condición física de cada Ser Humano.
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Alimentación debe respetar la “naturaleza y el estado” del Ser Humano
