Corazón
Los compuestos del ajo se convierten en sulfuro de hidrógeno, una sustancia química que relaja los vasos sanguíneos y aumenta el flujo sanguíneo y la circulación. Los estudios realizados, citados por varios sitios web internacionales, mostraron que el sulfuro de hidrógeno desempeña un papel fundamental en la prevención de enfermedades cardíacas como infartos, trombosis o arteriosclerosis.
Enfermedades degenerativas
El consumo regular de ajo crudo puede disminuir el riesgo de enfermedades degenerativas de colon, mama, piel, pulmón, vejiga y próstata, además de ayudar a prevenir enfermedade degenerativa del esófago y del estómago. Esto gracias a la alicina y a la salil-cisteína, entre otros componentes, que son reconocidos por su potencial antioxidante. Según un estudio del “Iowa Women’s Health Study”, que siguió a 41.837 mujeres entre los 55 y 69 años, durante cinco años, constató que existe una asociación entre el consumo de ajo y una disminución en el riesgo de enfermedade degenerativa de colon.
Hígado
Por contener compuestos sulfurosos, el ajo ayuda en el trabajo de desintoxicación promovido por el hígado, activando enzimas que inhiben el crecimiento bacteriano y favorece la eliminación de sustancias que ya no son necesarias al organismo y que serán metabolizadas y excretadas por la bilis.
Sistema inmunitario
El ajo tiene una gran fuente de vitamina B6, que es fundamental para tener un sistema inmunológico saludable y para el crecimiento eficiente de nuevas células. Al aumentar la resistencia inmunológica, disminuye la ansiedad y el cansancio. Tiene propiedades antiinflamatorias y por eso es muy utilizado en el combate a infecciones bacterianas, virales y fúngicas, como por ejemplo: gripe, tos, alergias y problemas respiratorios, como bronquitis y asma. Una receta antigua revela que a la primera signal de resfriado se debe comer un diente de ajo después de sumergido en miel refuerza el sistema inmunitario y así evita el resfriado.
Impotencia
El ajo puede aumentar los niveles de testosterona y mejorar la circulación sanguínea que estimula la producción de óxido nítrico de enzimas y sintasa de óxido, que puede mejorar la libido y ayudar con la impotencia.
Sistema gastrointestinal
El poderoso ajo es aún beneficioso para el sistema gastrointestinal, reduciendo los procesos de fermentación intestinal y alivia también las molestias estomacales. Puede ser un poderoso estimulante del apetito, ayuda a una buena digestión de los alimentos y evita la acidez estomacal. Es todavía un regulador del nivel de azúcar en la sangre, ya que aumenta el nivel de insulina en circulación, lo que puede ayudar en el control y en el tratamiento de la diabetes.
El ajo contiene altos niveles de iodo lo que lo convierte en un producto muy eficaz en el tratamiento de las condiciones de hipotiroidismo. Ayuda aún en situaciones de estreses renales, ya que el ajo hace expulsar las toxinas del cuerpo, eliminando el exceso de líquido, sodio y potasio.
Oídos
La infección de los oídos puede ser combatida a través de este antibiótico natural. Colocar un diente de ajo triturado en una gasa debajo del lóbulo de la oreja durante unos minutos. Alternativamente coloque un diente de ajo crudo y pelado en cada oído y haga una respiración profunda durante cuatro veces seguidas y repitalo por cuatro o cinco veces más.
Dientes
Colocar un poco de ajo majado directamente sobre el diente afectado ayuda a aliviar el dolor debido a las propiedades antibacterianas y analgésicas. Sin embargo, es necesario tener cuidado ya que el ajo puede ser irritante para la encía.
Dolor en las articulaciones
Hacer una pasta con ajo amasado, y aplicar directamente sobre la piel en la zona herida para reducir o eliminar el dolor. Normalmente no lo hacemos debido a su olor muy intenso, pero en el caso de una emergencia es excelente.
Gripes e infecciones
Ingerir el ajo crudo es la mejor opción. Pero también podrá optar por agua o té de ajo. Por ejemplo, coloque tres tazas de té de agua a hervir con cinco dientes de ajo rallados durante tres minutos. A continuación, añada zumo de limón y miel, agite muy bien, pase un pasador y beba varias veces al día.
Otras aplicaciones beneficiosas
Cabellos
El ajo ayuda a frenar la caída del cabello, gracias a sus altos niveles de alicina. Hacer un batido de seis dientes de ajo en 300 ml de agua y aplicar en el cuero cabelludo, masajeando durante dos minutos. Después es sólo lavar normalmente con champú.
Acné
Machacar un diente de ajo y pasar la pasta en la cara antes de dormir. El poderoso ajo ayuda a desinflamar la piel afectada por los clavos y las espinillas.
Aftas
Debe aplicarse el ajo majado sobre la afta durante algunos minutos. Las propiedades antiinflamatorias naturales pueden ayudar a reducir el dolor y la hinchazón.
Pelos enquistados
Mezclar aceite y ajo a fuego lento hasta que los dientes de ajo estén cocidos. Después de enfriarse, esparcir en la piel sobre los pelos enclavados. Las propiedades antiinflamatorias del ajo alivian los pelos enclavados.
Callos y verrugas
Majar o cortar en láminas un diente de ajo. Colocar el ajo sobre el callo, verruga o uña enclavada y hacer una venda con gasa, o colocar un algodón y una cinta adhesiva por encima. Haga esto antes de acostarse y deje que el ajo actúe durante la noche y retire la venda por la mañana. Repita la operación durante uno o dos días y diga adiós al callo, uña enclavada o verruga. Colocar el ajo sólo sobre el callo o verruga, pues el poder del ajo puede quemar la piel.
Sabañones
Debido a sus propiedades antifúngicas, el ajo puede ser una buena forma de eliminar los sabañones y picor en los pies. Ponga en remojo los pies en el bidet o en una cubeta con agua caliente con ajo majado.
Repelente de mosquitos
El consumo regular de ajo en la alimentación ya protege contra las picaduras de insectos y sus efectos como por ejemplo la malaria. Sin embargo, si estamos al aire libre podemos frotar ajo majado directamente en la piel o el agua de ajo, funcionará como repelente natural.
Este texto es una toma de conciencia. En consonancia con la estación del año y el momento en que se encuentra, cabe a cada un sentirse si debe consumir este alimento. La dosaje y frecuencia dependen de la naturaleza y de la condición física de cada Ser Humano